DESCUBRE LA OROTAVA
Costas y playas
Zona litoral. El Rincón.
Se puede iniciar esta excursión desde la avenida de las Palmeras en el Puerto de la Cruz, cruzando el barranco de Martiánez y ascendiendo por las empinadas escalinatas del camino de las Cabras. Un paseo nos lleva hasta el mirador de La Paz y la ermita de San Amaro donde se puede observar el océano y hacia el este el recorrido de la costa de La Orotava. Pasada la autovía un camino cementado nos lleva hacia el barranco de San Juan desde donde se divisa la playa del Bollullo que alcanzaremos en unos minutos y antes de las escaleras de acceso tenemos el mirador sobre la playa de los Patos o de Martínez Alonso, con una vista impresionante sobre los acantilados. En este punto volveremos sobre nuestros pasos y ascendemos entre plataneras por la carretera asfaltada hasta alcanzar el camino del Ancón. Al final de éste tenemos el sendero costero que nos llevará a esta magnífica playa.
Playa del Ancón La Orotava.
Nexo de unión con el municipio vecino del Puerto de la Cruz: el camino de El Ciprés.
El 16 de septiembre de 2008 y mediante Decreto, el Gobierno de Canarias declaró Bien de Interés Cultural con categoría de Sitio Histórico, el Camino del Ciprés, uno de los pocos ejemplos de camino empedrado tradicional que subsisten en la localidad, una obra de ingeniería viaria tradicional y con un extraordinario valor etnográfico e histórico.
El Camino de El Ciprés, localizado en la Finca El Ciprés, se remonta a los orígenes del Puerto de La Orotava, desde el siglo XVI, como embarcadero de la producción agrícola del Valle. Su buen estado de conservación, la singularidad de su empedrado, la anchura de la calzada, el entorno agrícola y la realidad de ser una de las mejores manifestaciones de infraestructura rural conservadas en la isla de Tenerife son otras de las razones que han llevado al Gobierno a ampliar su protección, preservando la configuración del camino, así como de aquellos inmuebles de valor patrimonial que lo flanquean
Los caminos tradicionales situados en los antiguos contextos agrícolas de La Orotava constituyen un testimonio histórico de suma trascendencia a la hora de conocer el pasado agrario de la localidad, y también a la hora de interpretar y comprender las estrategias de organización y explotación de ese territorio de signo rural. Tradicionalmente los caminos resultaron vitales como arterias de transmisión básicas para el transporte y comercialización de la producción agraria. Del mismo modo, este tipo de vías resultaron fundamentales para la ganadería, al constituir sendas y cañadas idóneos para la trashumancia del ganado.
El camino de El Ciprés fue la más importante vía de comunicación con el vecino municipio del Puerto de la Cruz y se encuentra en la Finca El Ciprés, donde se traslada el centro de experimentación con primates dirigido por Wolfgang Kohler en la segunda década del siglo XX, después de que la Compañía Yeoward comprara la Finca de La Costa, junto con la Casa Amarilla, en julio de 1918. En este lugar, el investigador alemán escribió buena parte de su obra e investigó los chimpancés hasta que abandonó la isla en mayo de 1920.
El empedrado del camino de El Ciprés está configurado por pequeñas hiladas de piedra dispuestas diagonalmente en torno a un eje central constituido por piedras de mayores dimensiones, configurando la apariencia de una espina de pescado.