El Espacio expositivo “San Roque” (trasera de la Iglesia de San Agustín) albergará la muestra, compuesta por más de una veintena de piezas de diferentes tipos (pinturas, esculturas, orfebrería, etc.), hasta el próximo 4 de abril
El Espacio Expositivo “San Roque”, ubicado en la trasera de la Iglesia de San Agustín, será el escenario donde se instale la exposición “Passio Domini. El legado del pueblo”, que se inaugura el próximo 21 de marzo y permanecerá abierta al público hasta el 4 de abril. La muestra, que reúne más de una veintena de piezas de variopintas tipologías -pinturas, esculturas, orfebrería, textil, material filmográfico, etc.- aglutina a través de cinco ámbitos parte del acervo histórico cultural del municipio orotavense. En la misma, se hace una revisión cronológica de la Vía Dolorosa, desde la Oración en el Huerto de los Olivos hasta el Enterramiento de Cristo, pasando por la Tierna Belleza que desprende la infancia de Jesús como premonición a lo que le sucediera una treintena de años después. La importancia de la Sacra liturgia en los templos durante el Triduo Pascual, en muchos casos secundada por las cofradías y hermandades que, a través de sus Insignias de fe, hacen demostración pública de su piedad. La Íntima devoción, más preciada de los hogares como culmen de esta semana de recogimiento y tradición.
La presentación viene de la mano de la celebración la conmemoración anual de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo en la Villa de La Orotava, un acto que representa la puesta en escena de los principales acontecimientos socioculturales que ha alcanzado una notable relevancia en la localidad desde sus orígenes, erigiéndose junto a las fiestas patronales y en especial junto a la infraoctava del Corpus Christi, en la que época en que La Orotava es visitada por un mayor número de personas.
De esta forma, en la exposición se pretende musealizar un sentimiento, algo que se antoja como una labor nada sencilla, puesto que el legado inmaterial que la Semana Santa ha venido desarrollando desde los orígenes de la Villa, va más allá de las piezas y los ornamentos. Se podrán admirar piezas privadas que no han visto la luz hasta la fecha como el Ecce Homo (portada del cartel); un estandarte de la Cofradía de la Misericordia, del siglo XVIII; un cuadro de la Oración del Huerto, del siglo XVII; un Calvario de madera, tejidos y postizos naturales, del siglo XVIII, entre otras. También se mostrarán vídeos inéditos de la Semana Santa de La Orotava, del año 1955.
La exposición, organizada por un comité científico formado por Adolfo Padrón (conservador-restaurador); Natalia Álvarez (mediadora cultural); Vilehaldo Arzola (historiador) y Juan Luis Bardón (historiador del arte), es una de las actividades que se incluye dentro de los actos de la Semana Santa orotavense.
El alcalde Francisco Linares y el cura párroco Óscar Guerra presentaron la muestra, acompañados de la concejala de Museos, Delia Escobar, y el coordinador Adolfo Padrón. Linares valoró esta exposición “única y extraordinaria” y agradeció el trabajo realizado por el equipo de personas que lo han hecho posible y la colaboración del cura párroco. “Son obras-apuntó- que forman parte de nuestro patrimonio local, auténticos tesoros de nuestro pueblo que se custodian en casas privadas, espacios públicos, inmuebles religiosos… y que ahora ven la luz de una forma conjunta bajo esta interesante temática. “De seguro será una exposición que no dejará indiferente a nadie”, apostilla.
Los ámbitos expositivos
El espacio expositivo se estructura en cinco ámbitos. Por un lado, el referido a la “Vía Dolorosa”, que hace alusión a la idea de que el arte ha utilizado el camino, la vía, como un símbolo de progresión, de evolución. En este sentido, la iconografía cristiana no ha sido menes, concibiendo la llamada “Vía Dolorosa”, también conocida como “Vía Crucis” o “Camino del Calvario”.
El segundo espacio, destinado a la “Tierna Belleza”, se podrán ver obras relacionadas con la infancia de Cristo, algo que nunca fue sencillo de representar por los artistas debido a la escasa información que brindaban los evangelios al respecto.
La “Sacra Liturgia” da título al tercer ámbito. En el mismo, se subraya que conocer la liturgia es valorar el lenguaje del símbolo de la fe. Mediante ella se expresan los ritos, se enriquecen las vivencias y se asientan los cimientos de la construcción de la creencia de los fieles. Sin ella, sin su valorización y puesta en práctica, el resto se desdibuja.
En el recorrido por las “Insignias de Fe”, se hace alusión a que la Semana Santa, evidentemente bebe de la liturgia y la Palabra, pero sin obviar que, desde hace siglos, se nutre y alimenta de la expresión popular, que dentro del seno de la Iglesia tiene su máxima representación en las hermandades y cofradías.
Por último, se completa la exposición con el quinto ámbito, el dedicado a la “Íntima devoción”, puesto que en la intimidad del hogar suelen gestarse muchos de los ejes culturales de nuestra vida, gracias a la educación y presencia de los mayores. Precisamente en base a la Semana Santa se desarrolla un cúmulo de tradiciones que, en ocasiones deriva en un patrimonio material que se podrá conocer en la muestra.