Bajo el título "Campaña de estudio y recuperación de los pajares de Pinolere", 20 jóvenes de siete Comunidades Autónomas del estado español, en edades comprendidas entre los 18 y los 30 años, realizarán del 3 al 17 de agosto de 2009 numerosas actividades en torno a la catalogación y recuperación de este patrimonio rural de las medianías del Valle de La Orotava.
Los pajares o pajales, construcciones de piedra seca con cubierta de paja de cereal, enlatados con varas de follao, castañero o acebiño, (también denominados casas pajizas) son un patrimonio arquitectónico singular de las medianías y del medio rural de la isla de Tenerife, y en concreto del municipio de La Orotava. Además de haber sido en el pasado un elemento fundamental de la arquitectura más tradicional y rural, una necesidad casi única de nuestro campesino para tener un lugar de habitación. Hoy en día representa una referencia en el paisaje de las medianías de la isla de Tenerife.
El origen de los pajares
El Valle de La Orotava alberga la mayor concentración de pajares o pajales del territorio insular. Estas construcciones de carácter rural y propias de las zonas altas y medianías de dicho Valle se componen de una techumbre de material vegetal que reposa sobre muros de piedra seca o mampostería enlucidos, en algunos casos, con barro, cal y arena.
La teoría más difundida que explica el origen de estas construcciones en las islas se remonta a la época de la Conquista Castellana, tras la cual se introducen en nuestros campos este tipo de choza pasando a convertirse en la vivienda del campesinado isleño.
Con la llegada del turismo a las Islas y tras el cambio económico que acontece a partir de la década de los setenta en el Valle, esta choza tradicional comienza a sustituirse paulatinamente por la casa de azotea. Este cambio en el tipo vivienda no fue radical por lo que, afortunadamente, se conservan numerosos pajares en distintos estados de conservación salpicando el Valle y entremezclados con las nuevas construcciones.
Su defensa, mantenimiento, conservación y recuperación o revitalización para el desarrollo rural de la isla de Tenerife pasa por una serie de actuaciones y por políticas globales que revitalicen los cultivos tradicionales de la zona de medianías, especialmente el de los cereales.
Objetivos del Campo de Trabajo
La iniciativa y el objetivo prioritario del desarrollo de este Campo de Trabajo Nacional es la revalorización de un oficio tradicional a punto de desaparecer como es el de Tapador de Pajares o Pajales. La Asociación Cultural Pinolere presenta el presente proyecto con el objeto de acercar a jóvenes entre 18 y 30 años al mundo tradicional y etnográfico de la arquitectura rural en la zona de medianías del Valle de La Orotava. La necesidad de sensibilizar para valorizar el medio rural a través de los jóvenes.
Además, la oportunidad de aprender los conocimientos asociados a un oficio tradicional, sus técnicas, sus herramientas sus materiales, como es el de Tapador de Pajares. La repercusión que tendría el que jóvenes quieran aprender oficios de nuestros mayores. Los pajares son un patrimonio arquitectónico que se identifica plenamente con los valores de la cultura rural, y en concreto con la cultura de las medianías del Valle de La Orotava. Este campo de trabajo busca sensibilizar y valorizar a la sociedad en general y a los jóvenes en particular sobre los pajares, el oficio de tapador de pajares y la necesidad de su protección. La necesidad de trasmitir a las nuevas generaciones materiales y técnicas tradicionales.
Esta propuesta puede complementarse en una segunda iniciativa o idea de conocer la realidad de las casas pajizas o pajares en otra zona del continente europeo o en islas de la Macaronesia como Azores y Madeira.
Por tanto, la formación de estos jóvenes acerca de un oficio tradicional, será una herramienta fundamental para el desarrollo de otras actuaciones, pero sobre todo servirá para poner en valor este importante patrimonio rural evitando su deterioro y desaparición.