Quienes han probado sellar su compromiso civil en la Villa aseguran que el amor allí sabe diferente. Quizás por su paisaje, la espectacularidad del Palacio Municipal, enclavado en pleno casco histórico monumental, o simplemente por las facilidades que el Ayuntamiento les brinda a los novios, ya que pueden elegir el día y la hora del enlace.
Lo cierto es que cada año son más las parejas que eligen La Orotava para casarse y celebrar uno de los acontecimientos más importantes de su vida. En 2010 se contabilizaron más de un centenar, al año siguiente fueron 70 y en 2012, 69.
Pero no sólo de la Isla, puesto que casi la mitad de ellas son foráneas. Por citar un ejemplo, el año pasado afianzaron su unión en el municipio ciudadanos alemanes, holandeses, rusos, italianos, argentinos, venezolanos, rumanos y cubanos; de otras ciudades de España, como Barcelona, Valladolid, Cuenca y Huelva; y las islas de La Palma y Gran Canaria.
Se da también mucho la circunstancia de que uno de los contribuyentes es orotavense y la pareja, peninsular o extranjera. Así, por ejemplo, ocurrió con un chico alemán y una chica de Valladolid que le entregaron una carta al alcalde, Isaac Valencia, en la que le contaban cómo se habían conocido y las razones por las cuales habían elegido el Ayuntamiento norteño para contraer matrimonio.
Después de descartar una larga lista de lugares en los que habían pasado sus vacaciones, una pareja de médicos de la Península también optó por el municipio para conmemorar el día más felíz de su vida. Incluso, les solicitaron a trabajadores del consistorio que fueran testigos de su boda. Finalmente, cuentan desde el gabinete de Protocolo, llegaron con dos amigos que viajaron especialmente para la ocasión y vestidos con el traje típico de mago que habían comprado el día anterior, también en la Villa, igual que el convite que disfrutaron a posteriori.
El municipio se encuentra entre los primeros de Canarias, el segundo para ser más exactos, en acoger bodas de parejas del mismo sexo nada más aprobarse en 2005 la ley que posibilita este tipo de enlace.
Las anécdotas acerca de los matrimonios celebrados son múltiples y algunas rozan lo excéntrico. Es el caso, por ejemplo, de un novio que quiso darle una sorpresa a su prometida y con la ayuda de un amigo cetrero llevó un halcón que recorrió el salón noble para entregarle las alianzas a la pareja.
Fueron incluso un día antes para que el ave, que ya tenía experiencia en esos menesteres, ensayara el vuelo al objeto de que no tropezara con las majestuosas lámparas que se encuentran en el salón de plenos.
Pero no ha sido el único animal, dado que hubo una pareja que prefirió que fuera un perro el que le llevara los anillos que luego intercambiaron. Hubo otra que quiso instalar una alfombra para entrar desde la calle a las Casas Consistoriales con un camino de velas en todo el recorrido. Al llegar a la escalinata, un saxofonista los esperaba interpretando una canción “muy especial” para los enamorados.
Vestidos con el traje típico, con sus hijos como principales asistentes, llegando en una limusina americana o en una guagua con los invitados, lo cierto es que todos ellos eligieron las Casas Consistoriales.
Pero también lo han hecho muchos famosos a nivel nacional que, para no ver invadida su intimidad y privacidad, han preferido mantener en secreto el lugar de su enlace. El consistorio, en este caso, tampoco puede desvelar la identidad de los contrayentes.
El personal municipal no sólo facilita asesoramiento sobre los trámites que deben realizar sino también sobre el desarrollo del acto que es siempre “a medida” de los novios. No obstante, la música, los arreglos florales o todos los complementos para amenizar la velada que quieran añadir corren por su cuenta.
Además, se les obsequia con una pequeña escultura, diseñada por un artesano de la localidad, con sus nombres grabados, que reproduce la fachada del Ayuntamiento de La Orotava, ese lugar especial que tantas parejas, por diferentes motivos, han escogido para darse el ‘sí quiero’.
Datos curiosos
El concejal que más casa. En este caso es el alcalde. Isaac Valencia ha oficiado en 2012 el 80% de los casamientos. Le sigue el edil de Cultura, Francisco Linares.
Tasas. Está establecido un cobro de 208 euros por casarse en la Villa, pero los orotavenses están exentos.
Días preferidos. Lo más frecuente es que se celebren entre dos y cinco bodas en un fin de semana aunque en un caso hubo hasta 8.