Un total de 213 vecinos del municipio se beneficiaron, a lo largo de 2005, del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) que oferta el Área de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de La Orotava al colectivo de mayores, discapacitados o personas que necesitan algún tipo de apoyo en su domicilio, por vivir solos o carecer de capacidades y recursos para realizar acciones de la vida cotidiana y de higiene personal.
La concejala responsable de Servicios Sociales, María Candelaria Delgado Taoro, resalta que el Ayuntamiento destina, anualmente, de sus presupuestos generales, una partida de más de 250.000 euros para esta acción social, que se desarrolla en la Villa desde 1990. Aunque desde el año 2001 se adjudicó su gestión a la cooperativa Mararía, que actualmente desempeña estas labores con un total de 23 auxiliares, procedentes en su mayoría de la propia Villa.
La edil recuerda que el objetivo primordial de este programa -- y uno más de entre las diversas ayudas que ofrece Servicios Sociales-- "es aportar unas prestaciones básicas que redundan en una mejor calidad de vida de los usuarios del servicio, y, sobre todo, de aquellos que tienen más necesidades de asistencia por razones de falta de autonomía o por limitaciones físicas, psíquicas y social-económicas y familiares". La actuación consiste, fundamentalmente, en una acción polivalente de carácter preventivo y rehabilitador. Así, de manera individualizada, se presta asistencia en actos domésticos, personales, sanitarios, educativos y de apoyo psicosocial y familiar. "Por lo que se garantiza una atención adaptada a cada situación particular", valoró. Entre otras tareas se realizan las de aseo personal y el apoyo doméstico como limpieza del hogar, elaboración de comidas, lavado y planchado de ropas. Pero también se realizan otros trabajos como el de controlar la medicación, acompañamiento a médicos, el recoger y gestionar recetas o favorecer la integración y socialización de estas personas.
La evaluación que se hace de este programa -- incidió Delgado Taoro -- "es muy positiva por los resultados que logra el servicio, ya que ha permitido mejorar la autonomía personal en el medio habitual de vida, la capacidad de relación social y la independencia de cada usuario". "Y además -- agregó-- evita el internamiento de estas personas en centros, a la par que se posibilita que permanezcan en su medio habitual, mejorando con ello su calidad de vida y las condiciones de convivencia con el grupo familiar y el entorno". No menos importante, es el hecho de que "con este servicio se presta, también, apoyo a aquellas familias que, por diversas circunstancias, no pueden atender las necesidades del usuario. Por tal motivo, recuerda que este servicio se ofrecerá a todas aquellas personas del municipio que lo necesiten y estén empadronadas en la Villa, y que para demandarlo sólo tienen que dirigirse al departamento de Asuntos Sociales.
Según los datos de la citada cooperativa Mararía, el 80% de los casos que se atendió en 2005, al igual que en años anteriores, se corresponde con mujeres, mientras que el resto son hombres. Además, la mayoría pertenece al grupo de mayores de entre 65 y 75 años de edad. Pero también existe un reducido grupo con menor edad, que sufre diversos problemas, como lesiones neuronales o alguna discapacidad, y necesitan, por tanto, cuidados paliativos.
María Candelaria Delgado recuerda que el Ayuntamiento cuenta, además, con un psicólogo para atender al colectivo de mayores que necesita apoyo de este profesional. Éste se mueve por los distintos centros de la tercera edad del municipio impartiendo talleres de memoria, a los que asisten un elevado número de personas.