Más de 30.000 personas se concentraron ayer en las calles del casco histórico de La Orotava con motivo de la 79 edición de la romería en honor a San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, que organiza la Sociedad Cultural Liceo de Taoro. Especialmente llamativo fue el elevado número de carretas participantes, 93 en total, tantas casi como las parrandas y grupos foclóricos que tomaron parte en la gran comitiva festera. Para Francisco Linares fue su primera romería como alcalde del municipio. Su antecesor en el cargo, Isaac Valencia, fue otro de los protagonistas de la jornada, al recibir un homenaje por parte de la Cofradía de Labradores.
El calor propio de estas fechas no faltó a la cita romera, aunque en menor medida gracias a las nubes tan características del norte de la Isla, la denominada panza de burro, ayer presente sobre el Valle para bendición de los romeros y romeras.
El sobresalto de la tarde lo protagonizó la rotura del yugo que sujetaba a las yuntas de una de las carreta cuando descendía por San Francisco, y que acabó lesionando al guayero que las dirigía. Afortunadamente, el incidente no pasó a mayores.
La romería villera volvió a recuperar ayer su recorrido habitual, sin el desvío hacia San Agustín y la plaza de la Constitución, que se ha venido realizando en los últimos tres años, a propuesta del Liceo de Taoro con motivo del 75 aniversario de la organización de la romería. La verbena pudo recuperar así su tradicional ubicación en la plaza del Kiosco, sin alterar el emplazamiento de puestos y cantinas. Fue el colofón a una gran fiesta.
Fuente: diariodeavisos.com
Fuente fotos: ayuntamiento