Cuatro villeros, fusilados en la época del franquismo, reciben la distinción de Villero de Honor a título póstumo

24/11/2010

Lucio y Manuel Illada Quintero, Pedro Hernández Lorenzo y Balbino San Millán López, cuatro orotavenses fusilados por las autoridades franquistas en 1940, recibieron en la tarde del pasado miércoles 24 de noviembre la distinción de "Villero de Honor", a título póstumo.

El alcalde entregó las distinciones a los familiaresEl Salón de Plenos de las Casas Consistoriales acogió este acto de reconocimiento público, presidido por el alcalde Isaac Valencia y el secretario accidental del Ayuntamiento, Jesús García Benítez. El evento contó con la presencia de casi todos los miembros de la corporación municipal, familiares de los homenajeados y numerosos ciudadanos. Con este acto se dio cumplimiento a la moción presentada por el grupo municipal Iniciativa por La Orotava (IpO), que fue aprobada por unanimidad por el Pleno de la Corporación municipal.

El alcalde habló en nombre de la corporación municipal destacando la vida y el valor de los cuatro homenajeados, y de tantas otras personas que padecieron y sufrieron múltiples injusticias en aquella etapa franquista, simplemente por no compartir las mismas ideas o exigencias políticas. Valencia agradeció la presencia de todos los asistentes al acto y en especial la de los familiares a los que se les hace ahora un merecido reconocimiento.

Tras la lectura del acta plenaria, en la que se resaltó la vida de cada uno de ellos, se hizo entrega de los títulos a los familiares representantes, que al final de la velada ofrecieron unas palabras muy cálidas, nostálgicas y emotivas para todos los presentes, al recordar y dignificar a estos cuatro orotavenses que lucharon con fervor por la libertad y la democracia, y representan a tantas otras personas que también fueron fusiladas en aquella época de la dictadura. En nombre de Lucio y Manuel Illada Quintero habló su sobrina María Luz Luis Illada; en representación de Pedro Hernández Lorenzo fue Bebi Gutiérrez Hernández y en el de Balbino San Millán López fue su hijo Balbino San Millán Rodríguez. Ellos son los familiares que recogieron también los títulos, más Asunción Illada Hernández, hija de Manuel Illada Quintero.

Homenajeados

Lucio Illada Quintero fue uno de los líderes políticos y sindicales más comprometidos del municipio durante el período republicano. Nació en la calle Calvario, en el seno de una familia liberal y progresista, y desde muy joven empezó a participar en la vida social y cultural de La Orotava. Publicó artículos en los medios de comunicación más críticos contra la oligarquía local y se convirtió en el principal motor del socialismo del Valle, además de ser militante activo a favor de los sectores obreros y populares. Lucio Illada Quintero tuvo también una intensa trayectoria en el Ayuntamiento de La Orotava, primero como gestor, y luego como concejal, llegando a ocupar en numerosas ocasiones la alcaldía accidental. Posteriormente fue gestor del Cabildo Insular de Tenerife y presidente de la Mancomunidad Provincial de Cabildos, entre muchas de sus actividades. Tras el golpe militar de julio de 1936, fue detenido, como tantos otros, y llevado a prisión. Habiendo logrado evadirse, pasa a la península donde se pone al servicio de la República desde su militancia comunista, lo que le permite ocupar distintos cargos y auxiliar a los canarios que luchaban en las filas republicanas. Al finalizar la Guerra Civil fue detenido, enjuiciado y condenado a la pena de muerte. Fue fusilado en enero de 1940, cuando sólo contaba con 39 años de edad.

Manuel Illada Quintero, hermano menor de Lucio, cursó estudios de Magisterio y tuvo también, desde joven, una intensa vocación política, social y cultural, a la par que en el ámbito musical coral. Fue fundador igualmente de la Agrupación Socialista de La Orotava, colaborador de publicaciones y luchador comprometido por los trabajadores del Valle. Formó parte del grupo de prisioneros que, tras su detención en julio de 1936, logró evadirse y trasladarse a la península, desde donde continuó su labor de maestro. Juzgado por un Consejo de Guerra en 1940, se le aplicó la pena de muerte, diez meses después de su hermano Lucio, ambos acusados de delito de rebelión.

Pedro Hernández Lorenzo, de profesión carpintero, fue fundador del sindicato de Trabajadores de la Construcción y de la Agrupación Socialista de La Orotava. Fue miembro activo de la organización Izquierda Republicana Antifascista y tuvo una intensa actividad sindical. Al igual que los compañeros mencionados, fue detenido y deportado y pudo evadirse hacia zona leal republicana. Allí trabajó como constructor y como soldado. Al finalizar la guerra, ingresó como muchos republicanos en la Plaza de Toros de Valencia, convertida en campo de concentración. Lo enviaron a Tenerife, donde fue juzgado y condenado a muerte, lo que se cumplió en agosto de 1940.

Balbino San Millán López, aunque nacido en Huesca, vivió y se casó en La Orotava, donde tuvo tres hijos. Fue guardia municipal y militante igualmente de la Agrupación Socialista. Por su militancia política y su condición de policía municipal, fue detenido después del golpe de julio de 1936. Al igual que sus compañeros de homenaje, fue detenido al final de la guerra civil, procesado por el delito de adhesión a la rebelión y fusilado. Junto a Pedro Hernández Lorenzo y otro detenido, (Juan Ramos Muñoz), dejó escrito en una carta: "vamos a morir como mueren los hombres que han vivido para defender un ideal noble y generoso, libre e igualitario y han luchado por una sociedad nueva, donde el fascismo y los fusilamientos sean un mal recuerdo del pasado".

Puedes ver las fotos del acto en esta galería.