El Cabildo y Pinolere impulsan una asociación de propietarios de pajares del Valle de La Orotava

14/01/2013

Ya se han rehabilitado 53 de estas construcciones desde que se inició el proyecto, que además permite recuperar el oficio de maestro tapador. El consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Joaquín Bethencourt, que visitó recientemente los trabajos de rehabilitación de un pajar en las medianías junto al presidente y al gerente de Pinolere, Leoncio Luis y Jesús García, respectivamente, destaca la importancia de esta iniciativa que permite preservar “este destacado patrimonio arquitectónico rural”.

La recuperación y rehabilitación de los pajares antiguos es un proyecto que se inició en 2005 con la elaboración de un inventario que permitiera conocer con exactitud la ubicación exacta de unos 300 pajares y su estado de conservación. Bethencourt explica “que la de este año será la sexta campaña para la rehabilitación de pajares y, desde que se inició el proyecto, ya se han recuperado 53 de estas construcciones”.

Cada año, la Asociación Cultural Pinolere coordina, organiza y gestiona la producción de centeno que es destinada a la rehabilitación de las techumbres de los pajares. En los últimos seis años se han consumido más de 5.700 “mollos” de paja (unidad tradicional de producción) en esta tarea. Cabe recordar que en 2005 solo existían 16 pajares con la cubierta en buen estado y la cifra ha superado ya el medio centenar gracias también a la implicación de más de 20 agricultores y un centenar de propietarios vinculados a esta iniciativa.

El consejero insular explica que este proyecto, único en España, “ha conseguido conectar a más de 200 personas y conservar un patrimonio único del Valle de La Orotava, además de recuperar un oficio tradicional y contribuir a la conservación y embellecimiento del entorno natural”.

Además, en la actualidad diez jóvenes están formándose en este oficio tradicional a través de los cursos especializados que organiza la Asociación Cultural Pinolere en colaboración con el Cabildo y el Ayuntamiento de La Orotava con el fin de garantizar el relevo generacional de los maestros tapadores.