Dos de los cortometrajes galardonados en la segunda edición del Festival de Cortos Villa de La Orotava obtuvieron el domingo sendos Premios Goya. Se trata de "Salvador. (Historia de un milagro cotidiano)", de Abdelatif Hwidar, y "Tadeo Jones y el Sótano de Maldito", de Enrique Gato. El trabajo de Hwidar, de 11 minutos de duración, obtuvo en la Villa el segundo premio, mientras que en la Gala de la Academia consiguió el galardón al mejor corto de ficción. La obra de Gato recibió la mención honorífica del festival orotavense y el premio al Mejor Corto de Animación en la Gala de los Goya.
El director del Festival villero y de la empresa Cinenfoque, Enrique Rodríguez, destacó ayer el "buen ojo" del comité de selección y del jurado del certamen de La Orotava, que en sus dos ediciones ha premiado o seleccionado como finalistas, siempre adelantándose a los acontecimientos, a cortometrajes que luego triunfan en los Goya. En 2007 ocurrió con la coincidencia de cuatro cortos seleccionados en La Orotava y en Los Goya: "La noche de los feos", "Equipajes", "La guerra" y "Broken wire".
Las coincidencias entre los premiados en el municipio norteño y los premiados en festivales y galas de renombre no terminan ahí. Eduardo Chapero Jackson, que obtuvo el primer premio en La Orotava en 2007 por su corto "Contracuerpo", ganó ese mismo año el mejor cortometraje europeo en el Festival de Venecia con su último trabajo, "Alumbramientos".
Además, los más de 2.000 asistentes a las dos sesiones del festival orotavense, que abarrotaron ambos días de proyecciones el Auditorio Teobaldo Power, también premiaron con su voto el corto "Nasija", de Guillermo Ríos. Un film que en nueve minutos condensa la historia de una subsahariana que es condenada por la ley islámica a morir lapidada y que, en otra prueba del ojo clínico en este caso del público villero, fue preseleccionado para los Oscar de Hollywood.
Enrique Rodríguez celebra las coincidencias del Festival de Cortos Villa de La Orotava con citas de gran renombre y considera que, "salvando las distancias, nuestro festival parece que se va convirtiendo en una especie de Globos de Oro del mundo del cortometraje, ya que, por lo visto en estos dos primeros años, quien quiera hacer quinielas sobre los Goya debería mirar primero el palmarés de La Orotava".