El centro ya supera los 5.000 socios y dispone de un rincón inclusivo con libros en braille y publicaciones adaptadas
La memoria del 2022 muestra avances en la recuperación de la actividad previa a la pandemia
La Biblioteca Municipal de La Orotava continúa siendo todo un referente en Tenerife y es una de las más importantes de Canarias, especialmente por sus fondos, contando con una colección bibliográfica de 64.024 ejemplares. Tres fondos son cerrados –como los del Hoyo Machado- L. Salazar (19.834); el de A. Lugo y Massieu (8.336) y el del Convento de Sto. Domingo (474); y el fondo general con unos 35.380 títulos.
El alcalde Francisco Linares, la concejala Delia Escobar y el director de la Biblioteca Municipal, Juan Carlos González, presentaron en la mañana de este martes, 7 de febrero, el balance de funcionamiento de este servicio el pasado 2022. El centro se había visto afectado por la situación que generó la pandemia mundial, y fue entre marzo y abril cuando se suprimieron las últimas restricciones impuestas y se recuperó la dinámica habitual; por lo que la memoria muestra que varios indicadores han mejorado respecto a los dos años anteriores y se acercan, en algunos casos, a las cifras prepandémicas. Tal es el caso de las consultas de documentos hemerográficos que duplicaron las cifras del año anterior con más de 10.000 ejemplares consultados, o los documentos objeto de préstamo exterior con más de 11.400 prestados. Y a lo largo del año se han incorporado 210 lectores nuevos, lo que demuestra que es una dinámica consolidada y que no se detuvo ni en los peores años, valora la concejala del área, quién también incidió en la apuesta del consistorio por la cultura y la educación.
El alcalde hizo hincapié también en este sentido, apuntando que la institución local destina anualmente unos 4 millones de euros a la cultura y la educación, y una partida de 500.000 euros al año para mantener este espacio donde se ubica la biblioteca y sala de estudio, “considerándolo una inversión, no un gasto”, recalcó. En esta línea, resaltó que el ayuntamiento está trabajando en los trámites administrativos para ubicar en breve, en la zona centro, una nueva sala de estudio con unas 90 plazas que esté abierta permanentemente. Y, por otro lado, se cuenta ya con el proyecto para crear una sala de estudio en el antiguo solar del teatro Atlante con unas 150 plazas, y de esta forma la biblioteca se destina exclusivamente a sus múltiples funciones como centro cultural.
La biblioteca es un centro cultural activo. Se creó en 1988 en la sede del antiguo casino y desde entonces no ha dejado de innovar sin perder la esencia con sus fondos bibliográficos y audiovisuales, su hemeroteca, actos culturales, tertulias literarias y su función como sala de estudio.
El director del centro desglosó los principales detalles de la memoria, subrayando que al terminar el año se contaba con 5.285 lectores, de los que 4.446 son adultos y 836 menores de 14 años. En cuanto al tipo de lector, se observa que el colectivo infanto-juvenil alcanza casi el 22 %.
Por otro lado, valoró que el centro ha recuperado de forma considerable su capacidad de generar actos culturales: cuentacuentos, conciertos, exposiciones, charlas, presentaciones de libros… El Club de Lectura pudo comenzar a celebrar de nuevo sus sesiones de debate en marzo y ya no detuvo su actividad. El servicio de Sala de Estudio añadió 436 horas adicionales a las horas de apertura que la biblioteca ofrece habitualmente. Por todo ello, González aseguró que “hay datos positivos que corroboran que la biblioteca ha recuperado su actividad habitual ofreciendo a los usuarios una oferta cultural diversa, que va más allá del simple préstamo de libros”. El centro dispone también de un rincón inclusivo que pretende facilitar el acceso a la lectura a personas con diversidad funcional por lo que se pueden encontrar libros en braille, audiolibros, y publicaciones adaptadas a personas con autismo o con importantes dificultades visuales, con mayores cuerpos de letra o uso de mayúsculas.
Cada año se deriva una importante inversión a la adquisición de nuevos ejemplares y a cubrir los horarios extraordinarios en fechas determinadas, así como para renovar los distintos espacios. Se continúa con la digitalización y ya el catálogo automatizado lleva 56.575 ejemplares registrados.
La hemeroteca cuenta con un funcionamiento autónomo, para lo que cuenta con sus propias instalaciones dentro del edificio general y un depósito auxiliar en el Centro usos múltiples La Torrita. Pero el valor de la hemeroteca villera radica fundamentalmente en los numerosos ejemplares antiguos que conserva, siendo valorada por ello como una de las mejores de Canarias, y conserva así gran parte de la prensa antigua del Valle de La Orotava, que se ha digitalizado. La Hemeroteca continúa con así con su propio proceso de automatización, contando a finales de año con 12.432 ejemplares registrados. Mientras que la Mediateca custodia 2.087 ejemplares, en su mayoría audiovisuales (1.624), aunque también se cuenta con documentos sonoros, audiolibros y archivos de ordenador.