El ‘Espacio San Roque’, anexo a la Iglesia de San Agustín en pleno casco histórico de la Villa, acogerá una novedosa exposición sobre la Inmaculada Concepción en La Orotava, donde ha sido y es muy significativa la devoción y el fervor de los vecinos y vecinas y de muchas familias a la misma.
En este emblemático espacio cultural, a partir del próximo sábado 23 de noviembre, se puede admirar más de una veintena de piezas de incalculable valor que se exponen por primera vez de forma conjunta. Y también es de destacar que se muestran, por primera vez, siete piezas inéditas, cedidas temporalmente por particulares del municipio. “Por ello—subraya el alcalde Francisco Linares— esta exposición es una gran oportunidad que se nos brinda, y no solo desde la perspectiva del sentimiento religioso sino también por el enriquecimiento e interés artístico-cultural que aporta, acercándonos más a todo lo referente a la Inmaculada Concepción en nuestra Villa”.
Esta iniciativa se enmarca además dentro del programa de actos configurada para conmemorar el bicentenario de la llegada de la escultura genovesa a la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción. Con motivo de esta efeméride, la Sede Apostólica otorgó a la parroquia el poder celebrar este año el Jubileo que ahora llega a su clausura. El cierre de esta celebración engloba actos de gran relevancia como la visita extraordinaria de la imagen a los templos del casco villero, al convento de las Hermanas de la Cruz y al colegio de la Concepción.
El coordinador de la muestra Adolfo Padrón detalla que la muestra se organiza en tres ámbitos que conectan de manera de manera sintética la devoción a la Inmaculada Concepción en La Orotava. La exposición “Madre y señora” estará abierta hasta el domingo 8 de diciembre en el espacio cultura San Roque, en horario de martes a domingo, de 11.00 a 13.00 horas, y de 17.00 a 20.00 horas.
Con la llegada de la escultura genovesa de Inmaculada Concepción a la parroquia homónima en 1824, la Colección Museográfica “El Tesoro de la Concepción” se vio en la necesidad de organizar una exposición que conmemorara esta significativa efeméride. “Madre y señora” es el título que aparece en el libro de sus extinta cofradía y que da nombre a esta muestra, explicó Padrón.
Muchos fueron los contratiempos que tuvo esta imagen tras su llegada: censura, olvido, reprobación, pero a día de hoy se constituye como uno de los hitos artísticos más importantes de la estatuaria decimonónica en Canarias. De igual manera, su arribo a la parroquia supone la culminación de un proyecto de renovación del conjunto de bienes muebles del nuevo edificio parroquial por parte de su patrocinador el mayordomo Antonio de Monteverde y Rivas (1768-1831) que heredará de sus predecesores. Además, los monasterios y conventos, especialmente los franciscanos, también se vieron influenciados por esta piedad popular y se convirtieron en fervientes defensores del dogma inmaculista. La exposición incluye lienzos de conclusiones de capítulos provinciales, imágenes procesionales y algunas tallas de gran formato que se albergaban en diversas capillas, todas formando parte de ese tesoro artístico que estos cenobios custodiaban.