En estos días se ha comenzado con la recolección de la cosecha de papas en la zona de medianías de La Orotava, y ésta se espera menor que la del año pasado. Además ésta se ve afectada por la polilla, y debido a esta problemática y a las malas condiciones atmosféricas, actualmente la cosecha está afectada en un 40%.
Desde el año 1999 se detectó la polilla guatemalteca, que ha perjudicado principalmente a los cultivos de la papa y sobre todo en el norte de Tenerife. El concejal delegado de la Concejalía de Desarrollo Económico local, Felipe David Benítez, anuncia diversas medidas para cooperar con el colectivo de agricultores afectados. En esta línea detalla que, entre otras cosas, se ha habilitado desde hoy jueves 22 de junio un contenedor frente a la Cooperativa de Papas de Benijos, para que todos los agricultores puedan depositar su producción afectada por el "bichillo". Los agricultores deberán depositar en dicho contenedor las papas bichadas ensacadas y posteriormente el ayuntamiento se hará cargo de trasladar toda la producción afectada a la planta de transferencia de residuos situada en el Polígono San Jerónimo. Desde esta Concejalía ya se ha comenzado a informar a los agricultores del municipio, "pues se apuesta de forma decidida por el sector primario de nuestro municipio", apostilla el edil.
"El objetivo de esta medida -- detalla -- es evitar que se entierren estas papas afectadas en los terrenos de los agricultores o que se depositen en lugares no apropiados, previniendo así la masiva afección de esta plaga en futuras cosechas". También con esta medida se pretende evitar nuevos focos de multiplicación. Esta iniciativa se toma teniendo en cuenta la importancia que tiene el sector primario, y en concreto, el de la papa, para los altos de La Orotava, pues son muchas las familias, y sobre todo en la actualidad, que viven de la agricultura. Asimismo se aprovecha para animar a la población a consumir productos locales, de la tierra, "pues supone un verdadero sacrificio luchar y sacar adelante una explotación agraria, teniendo que combatir este año a dos fenómenos adversos: la situación económica y la escasez de agua de la lluvia.