Ya se han finalizado las obras de reforma y mejora en el alumbrado público de la zona alta de Barroso, en el término municipal de La Orotava, "por lo que se contribuirá a un considerable ahorro energético", informa la concejala delegada de Servicios Generales del consistorio villero, Johana Santos. La edila detalla que "estos trabajos, adaptados a la denominada Ley de Protección del Cielo de Canarias", suponen una inversión cercana a los 155.00 mil euros, que se sufragan en su totalidad con el Fondo Estatal de Empleo y la Sostenibilidad Local.
La actuación se llevó a cabo, en concreto, en parte de la carretera TF-21 y en Camino de Candelaria, así como en Hacienda Perdida, las vías Isidoro Sánchez Rodríguez, San Miguel y S/C de la Palma; Urbanización Colombo Bajo calle A, Camino el Sauce y Camino El Gallo. Estas zonas en las que se ha intervenido, de marcado uso residencial con construcciones a ambos lados de la vía y varias parcelas con huertas, se benefician así de estos nuevos puntos de alumbrado que sustituyen a las anteriores luminarias que presentaban un alto grado de deterioro y generaban insuficiente iluminación. "Por lo que se contribuye también a mejorar la seguridad de los viandantes", apostilló la concejala.
Johana Santos señala que todas estas luminarias se adecuan a la normativa de la Ley para la Protección Astronómica del Cielo de Canarias, y que durante la intervención se han seguido todas las recomendaciones de la Oficina Técnica del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC). Entre otras exigencias, esta ley contempla la reducción de los niveles luminotécnicos a partir de las doce de la noche, y la colocación de lámparas de vapor de sodio de alta presión.
Ahorro energético
El ahorro en el consumo se producirá directamente por la reducción de la potencia unitaria en cada punto de luz, así como por la instalación de un reductor de consumo. Se continúa de esta forma, y con este proyecto, con la renovación del alumbrado público iniciado hace varios años en La Orotava, especialmente en las áreas de influencia marcadas por el Instituto Astrofísico de Canarias como es este barrio de Barroso, ubicado en las medianías de la Villa, "para favorecer una menor contaminación lumínica".
Tomando en cuenta que las luminarias se encuentran activas una media de 12 horas al día, los 365 días del año, se genera un consumo anual de aproximadamente 65.700 kilowatios por hora y por año, en la zona del proyecto. Con los nuevos puntos de luz se proyecta un consumo de 36.792 kilowatios h/año, "y, por tanto, se logra una reducción cercana al 40%". El ahorro total se consigue por el cambio de lámparas y por los citados reductores de consumo. Las nuevas lámparas son de vapor de sodio de alta presión, en sustitución de las de mercurio. Son cerradas para un mejor rendimiento lumínico y tienen un control de encendido y apagado regulado por un reloj astronómico que optimiza los períodos de encendido a los estrictamente necesarios. Las luminarias empleadas están garantizadas por cinco años y están soportadas por material resistente a las acciones de la intemperie. Y están ubicadas entre 25 y 30 metros, según la distribución y tipología indicadas por las normativas de mencionada La Ley del Cielo. "El mejor rendimiento de las fuentes de luz permitirá a su vez aumentar la vida útil de estas lámparas", concluye la edil orotavense.