El Mercadillo de Productos Agrícolas, Ganaderos y Artesanos del Valle de La Orotava, instalado en la zona de La Torrita, funciona a pleno rendimiento desde su apertura en junio del pasado año. Cada sábado se recibe una media de 600 visitas, lo que ya es un éxito para esta novel infraestructura que pretende potenciar el sector agrícola-ganadero y artesanal de la comarca.
La Asociación de Agricultores, Ganaderos y Artesanos se encarga, tras lA firma de un convenio con el Ayuntamiento, de la gestión del recinto y de que todo funcione correctamente, aunque la institución local continúa velando por el bueno funcionamiento del centro y colaborando en todo aquello que sea necesario. El Consistorio tiene la obligación de garantizar la calidad de los productos que se vendan y su procedencia, así como de que se cumpla con todos los criterios jurídicos, e higiénicos-sanitarios, exigiendo entre otras cosas que todos los agricultores posean el carné para manipular productos fitosanitarios. Mientras que entre las funciones de la citada asociación destaca el encargarse de la gestión de las subvenciones; llevar a cabo las necesarias acciones que contribuyan a mejorar esta infraestructura; ser vínculo negociador ante entidades públicas y privadas, y organizar cursos y charlas para los asociados.
El mercadillo es de carácter comarcal y abre al público, en principio, los sábados de 9:00 a 15:00 horas. Y no se descarta que se pueda ampliar su horario en un futuro.
Esta infraestructura, que se ubica anexa al Centro de Usos Múltiples de La Torrita, ocupa una superficie total de 1.500 metros cuadrados. La nave abarca unos 800 metros cuadrados, y el resto se destina a otras instalaciones complementarias. Así, junto al recinto se localiza una pequeña plaza pública con bancos y jardineras, un parque infantil, una cantina, y una pequeña capilla que alberga al patrón de los agricultores y ganaderos, San Isidro. Además, este espacio cuenta en el entorno con otras importantes áreas como una amplia zona de aparcamientos, el local de la propia asociación, las aulas para impartir clases y la zona de baños públicos.
También es relevante la creación de una vía que conecta directamente el centro urbano con esta zona de La Torrita. Esta carretera es de doble sentido y por ello facilita la comunicación con el mercadillo y una mejor circulación vial, pues ha permitido eliminar la salida hacia la calle Carrero Blanco o rotonda de la Carretera General de Las Cañadas, que debido a su pendiente generaba problemas de tráfico. La salida en coche siempre será por esta nueva vía hacia Sor Soledad Cobián, pero los accesos se pueden hacer por ambos lados.
PROYECTO
Los trabajos de construcción de este centro comenzaron en diciembre de 2006 y concluyeron a finales de mayo de 2007, aunque la apertura tuvo lugar en junio tras la celebración de las elecciones municipales.
Este proyecto, que se adjudicó a la empresa villera Tinecor S.L., supuso una inversión de más de 300.000 euros. El 50% lo sufragó la Consejería de Comercio del Gobierno de Canarias, y el resto lo financió el Consistorio orotavense con recursos propios. El Cabildo de Tenerife se encargó, por su parte, del equipamiento del centro.