La plaza de La Florida acogerá un año más este próximo domingo, 28 de agosto, el Mercadillo con el que los vecinos de la zona pretenden lograr fondos para culminar la construcción de la nueva iglesia del barrio, un proyecto que data de hace catorce años. La iniciativa, que promueve la Comisión Pro.Nueva Iglesia de La Florida, trata de ingresar parte de los alrededor de 90.000 euros que faltan para que el templo se convierta en una realidad.
Las obras que quedan por ejecutarse son el acondicionamiento interior del local anexo al velatorio, que tiene previsto realizar el Ayuntamiento villero, y la colocación de suelos, el pintado y la instalación de barandas, que corresponderán a los vecinos, el Obispado y diversas entidades colaboradoras. Hasta ahora se han invertido 752.000 euros. La mayor inversión realizada hasta ahora ha correspondido a la corporación municipal, que ha destinado 1.205.300 euros a la urbanización de la parcela, los muros de contención, el acceso, los velatorios, la casa parroquial, el acceso al campo de lucha, la construcción del local situado bajo el templo, el local anexo al velatorio y la plaza.
Mientras, en lo que tiene que ver con el edificio de la iglesia en sí, la mayor aportación ha provenido de los propios vecinos, un 46 por ciento, que han recaudado mediante rifas, loterías, comidas, cuotas, donativos, festivales, colectas e iniciativas como las del Mercadillo. En la edición del año pasado, en dicho Mercadillo se recaudaron unos 7.000 euros. Tras los vecinos, el Ayuntamiento orotavense es que el realiza el mayor desembolso en el templo, un 26 por ciento, seguido del Obispado con un 20 por ciento mediante un préstamo hipotecario sobre la casa parroquial y otro 8 por ciento a través de transferencias.
Los libros oficiales, los documentos justificativos y las facturas de todas las actuaciones que se han llevado a cabo se encuentran a disposición de quien desee consultarlos. El único trámite requerido para ello es solicitarlo a la Comisión. Además, todos los pagos y certificaciones se han llevado a cabo previa comprobación de los trabajos realizados y con el visto bueno de los técnicos municipales y del Obispado.