Con la llegada del Jueves Santo comienzan los actos más multitudinarios de la Semana Santa villera, donde el protagonismo lo asumen las cofradías y hermandades más numerosas. La Procesión del Mandato recorrerá las calles de la Villa a partir de las seis y media de la tarde desde la Parroquia de Ntra. Sra. de La Concepción. La imagen del Stmo. Cristo de la Misericordia pone el inicio de una jornada marcada por la solemnidad y el recogimiento.
Poco a poco, miles de personas se van congregando en las calles del centro histórico para asistir a uno de los momentos mágicos de estos días, la procesión del Stmo. Cristo de La Columna. A las diez de la noche, con rigurosa puntualidad, parte la procesión desde la Iglesia de San Juan Bautista en dirección hacia la Plaza del Ayuntamiento. La salida de la imagen del Stmo. Cristo sobrecoge a cuantos la contemplan por su emotividad, en medio de un impresionante silencio tan sólo interrumpido por el canto de las tradicionales malagueñas que se llevarán a cabo de diferentes puntos de su recorrido procesional.
El punto álgido de esta procesión tiene lugar durante su entrada a la Plaza del Ayuntamiento, donde al son del “Adiós a la Vida” integrante de la Ópera Tosca de Giacomo Puccini, e imbuido en la singular atmósfera lumínica de las velas, se genera un ambiente único compartido tanto por los partícipes como por los numerosos espectadores que se dan cita en el recinto durante la noche del Jueves Santo.
La jornada del Viernes Santo es un día intenso, en el que a primera hora de la mañana tiene lugar la Procesión del Encuentro desde la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán y en el que se representa el encuentro de Jesús camino del Calvario con San Juan y la Virgen. Cientos de personas se congregan en los aledaños de la Plaza Patricio García para presencias esta singular ceremonia.
Al mediodía, será la imagen del Cristo del Calvario la que recorra las calles de La Orotava desde su Iglesia de San Isidro hasta la Parroquia de La Concepción y posterior regreso.
La Villa de La Orotava no posee una procesión magna a diferencia de otras muchas localidades, pero conserva una singular procesión del Santo Entierro en la que participan todas las hermandades y cofradías de la localidad. Partiendo desde la Parroquia de San Juan, recorre las principales calles del centro histórico, finalizando una ceremonia de la sepultura del señor que atrae a cientos de fieles en el interior del templo.