Desde que el 10 de julio de 2012 la Casa de la Juventud abrió sus puertas, no se han dejado de ofertar actividades, recursos y herramientas para todos los jóvenes de La Orotava. Cada año es utilizada por miles de usuarios. Así, en lo que va de este año, ya han pasado más del millar; sin contar con todos aquellos que han participado en las numerosas actividades y eventos organizados durante estos primeros meses del 2022. El pasado año, a pesar de ser un año de pandemia, acudieron a las instalaciones alrededor de 2.300 usuarios.
La Casa de la Juventud, subraya el alcalde Francisco Linares, “es centro neurálgico, un espacio abierto a la totalidad de los jóvenes entre 12 y 35 años, sirviendo de lugar de encuentro, de convivencia, de intercambio de experiencias, punto de comunicación y el diálogo”. También se facilita soporte material y técnico a iniciativas juveniles de forma individual o colectiva orientadas a la participación juvenil. Los jóvenes de todos los núcleos urbanos y del centro pueden acceder a la amplia oferta lúdica, cultural y formativa, así como a la variopinta programación que se organiza anualmente para el colectivo.
Servicios
El edil delegado del área de Juventud, Darío Afonso, detalla que en los más de 690 metros cuadrados con los que cuenta, se ofrecen diferentes servicios como un punto de información juvenil, salas de estudio y aulas de formación, espacio de exposiciones, mediateca, sala polivalente para cursos y talleres. En el centro se llevan a cabo actividades y acciones de todo tipo lúdico, deportivas, tecnológicas, didácticas… atendiendo especialmente la demanda e inquietudes de los propios usuarios. Pero la mayor vertiente se ocupa en ofrecer formación de interés que pueda beneficiar a los jóvenes para mejorar sus conocimientos y facilitar su preparación para acceder al mundo laboral.
Desde hace varios meses la Casa dispone de un local de ensayos completamente equipado (mesa de mezcla, amplificadores, batería, teclado, micros…) que se puede usar bajo reserva. Y también cuenta con la radio joven “hecha por y para ellos”, puntualiza Afonso. “Se intenta formar a los jóvenes en el funcionamiento de la radio con el objetivo de que hagan programas y den noticias de interés para el propio colectivo, pero siendo ellos los que contacten con las fuentes y hagan todo el proceso de información con total libertad”, apuntó. Atendiendo las sugerencias de los jóvenes usuarios se genera la programación anual con nuevas propuestas que se suman a las actividades ya consolidadas y que siguen siendo un reclamo como el curso de fotografía digital, el proyecto Espabilé, Cerebritos e Inteligencias Múltiples, las actividades en la naturaleza y Arte Joven, entre otras.